En esta ocasión os recomiendo un libro.
Se lee casi del tirón, no solo por lo cortito de la historia, sino también por lo ameno de su lectura y lo reconfortante de su historia.
Como no, es una historia con la cocina como telón de fondo y como hilo conductor del argumento, no en vano al final de la novela aparece un glosario con las recetas de las comidas que se narran en la historia.
Es un libro de amor y odio, de soledad y compañía, de amigos y enemigos, pero sobre todo de como a través de la cocina la protagonista encuentra su tabla de salvación y de como alrededor de sus platos bien cocinados reúne un grupo heterogéneo de personas que a pesar de sus diferencias encuentran un camino en común.
Me ha hecho pensar, como a través de los fogones podemos encontrar un porqué en nuestro día a día, como podemos dar alimento al cuerpo y al alma a través de una buena cocina, y como podemos dejar de lado nuestros problemas diarios entre ingredientes y cacharros.
Espero que os guste.
